Cita Bíblica:

                                                    "Perdónanos nuestras ofensas como nosotros

perdonamos a los que nos ofenden"

Lucas 11: 4





Hoy comenzamos el tema 3 del Camino del Amor: Paso a Paso: Perdón vs Ira

Esta es la enseñanza que vamos a explorar durante toda la semana. Como Cristianos, la mayoría de nosotros decimos el Padre Nuestro, al menos una vez al día. Incluye el increíble desafío de perdonar a todo el mundo por todo, si queremos ser perdonados.



Con frecuencia escuchamos a otros decir: “es imperdonable”. Y en nuestros corazones, a veces, incluso si decimos que perdonamos, podemos albergar resentimiento mortal. "Pecar es humano; perdonar es divino", es una frase del poeta inglés Alexander Pope. La mayoría de nosotros sabemos que en el caso de tener heridas graves, para perdonar realmente desde el fondo del corazón, esto solo se puede hacer con la gracia del Dios.



Rehusarse a perdonar puede ser visto como desamor, odio, resentimiento, abandono total, hasta formas más leves como evitar que otros se reconcilien. En mi libro “Domando el León Interno: Cinco Pasos de la Ira a la Paz”, me identifico con una de las razones más comunes subyacentes a motivos de enfado, y es cuando quiero ser la heroína del drama de mi vida y quiero que otros sean personajes secundarios o fugaces, que dicen y hacen lo que mejorará mi papel! Ya que ellos también tienen el mismo deseo y quieren que yo sea un personaje secundario, se resistirán a mí y usualmente me sentiré enojada cada día.



Aquí hay una historia de perdón que debe ayudarnos a perdonar a todos! Una mujer me dijo que su marido la dejó a ella y sus dos hijos para irse a vivir con otra mujer. Tuvo 3 hijas con esta otra mujer sin obtener un divorcio para casarse con ella. Después de unos años la primera esposa decidió aceptar a su esposo de regreso por el bien de los niños. Más tarde, antes del nacimiento del tercer hijo, el hombre dejó nuevamente a su esposa por la segunda mujer. Sin embargo, la primera esposa encontró a Jesús y volvió a la Iglesia Católica. Su marido regresó. Confesó sus pecados y disfrutaron de muchos años juntos. En su lecho de muerte, la otra mujer llamó a la esposa y pidió perdón. Ella la perdonó. La segunda mujer y las hijas llegaron al funeral y ahora todos están muy cercanos!



​Santa Madre Teresa de Calcuta solía preguntar a los moribundos si querían ir al cielo. Cuando decían "Sí !", ella contestaba: “Primero tienes que perdonar”.

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Tal vez tu primera reacción a esto sea “sí, sí, sí…pero no a aquel”. Si es así, no cierres tu corazón. Inténtalo. Con Dios todas las cosas son posibles.

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Durante esta semana buscaremos crecer en amor para perdonar en áreas específicas de nuestras vidas: familia, amigos, jefes, compañeros de trabajo, Dios, y por último, perdonarnos a nosotros mismos.



Haz hoy una lista de todas las personas que has conocido con quienes has estado airado, sin importar si las has perdonado o no. (Si estás escribiendo cosas en lugar de hacer un listado en tu mente, puedes utilizar iniciales frente a los nombres).





Ejemplos de Ronda:
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Terminé con una lista de casi cuarenta nombres de personas por las que me sentía herida en gran o pequeña medida. Medité sobre este gran número y me di cuenta que me siento herida por toda persona que no quiere ser como yo quiero que sea, es decir que siempre me sentiré herida.


Tus ejemplos de victorias en el alcance de tu perdón:

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                                     ..............................................................

​                  (.... puedes iniciar un diario, escribir en una libreta, un cuaderno,
                   o simplemente pensar sobre ello y tenerlo en cuenta )

​Oración de Ronda:

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​" ¡Oh, mi Jesús, tú que perdonaste a tus verdugos durante tu Pasión, a fin de conducirnos al Reino del Amor, ayúdame esta semana. Tú conoces la punzante herida y la amarga angustia de las maneras como he sido herida. Todavía me pides que perdone. Por lo tanto, pon tu corazón misericordioso en mí, de manera que pueda recibir el bálsamo de la misericordia y derramarlo sobre mis enemigos como Tú lo hiciste. "




​Tu propia oración:

                                   ............................................................................................

  (No tiene que ser muy elaborada ........... solo deja que tu corazón te guíe ......)


Nota al lector: No te desanimes si encuentras que fallaste en superar perfectamente el reto en este día o en los próximos. Un corredor de maratón no renuncia si él/ella tropieza por el camino. Cualquier fracaso puede ser el ímpetu para ver cuánto necesitas orar pidiendo ayuda para este reto en el futuro.​



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